Con esta salsa griega (con yogur), participo en el concurso que ha creado Tito, el bloguero más salsero de la blogósfera, en su blog "Las Salsas de la Vida". Pinchando aquí podéis ver las bases del concurso.
He buscado la receta de esta salsa que todos (o casi todos) conocemos y se llama "Tzatziki", y he encontrado muchas, en libros, en Internet y en los diferentes blogs de
cocina. Todas por supuesto,
tienen el yogur como ingrediente principal, pero encontré una que explica todo
perfectamente y el por qué de el proceso. Pinchando aquí podéis ver la receta original, que además presentan con un interesante vídeo.
Esta es una receta muy sencilla de
preparar; sin embargo, es importante que se respeten los tiempos de reposo para
poder obtener así una salsa cremosa.
Ingredientes:
• 750 ml de yogur natural (Yo: Yogur griego)
•
1/2 pepino rallado (Yo: 1 pepino pequeño)
•
2 dientes de ajo machacados hasta que hayan quedado como puré
•
El zumo de medio limón
•
1 cucharada de menta fresca bien
picada
•
Un chorrito de aceite de oliva
•
Una pizca de sal
Preparación:
Dejar que el yogur suelte,
durante toda la noche, el máximo líquido posible y así se quede concentrado.
Para ello ponerlo en un colador de malla finísima o en un paño para queso, (Yo:
utilicé unas gasas estériles) limpio y dejar que escurra. (Se deja en el frigorífico
para evitar que se pueda estropear).
Hacer lo mismo con el pepino.
Rallarlo y dejarlo toda la noche escurriendo en iguales condiciones que el
yogur.
Posteriormente podemos aún pasar el
pepino por papel absorbente.
Al día siguiente mezclar el pepino
con el yogur, el ajo bien machacado, la menta fresca picada, el zumo del
limón y una pizca de sal en un bol. Regarlo ligeramente con aceite de oliva,
ponerle una tapa y dejarlo reposar bastante tiempo (de ser posible otra noche
entera).
Al día siguiente ya se puede servir en frio para acompañar, sobre todo, a carnes asadas, Kebab o el Gyro. También podemos utilizarla acompañando
platos de curry o como dip para untar galletas o cruditès.